La boda de Isa y Ade

Ya ha pasado el primer añito de esta gran boda.

Han pasado muchas cosas este año que impedían que pudiera sentarme a actualizar el blog. Será que lo bueno... se hace esperar.

Conozco a Isa desde el instituto, era una de mis inseparables. Si tuviera que definirla con una palabra, sería nobleza.

Ade llegó más tarde. Su historia es verdaderamente bonita y reafirma eso de que cuando dos personas están destinadas a encontrarse, el mundo conspira para ello.

Ambos son aficionados de los festivales musicales de música alternativa. Coincidieron en uno de ellos, siendo cada uno de una parte del mapa (ella, de Cuenca, él de Cáceres). Se conocieron, hablaron...

Y sin darse los números de teléfono, se reencontraron en el 2º y de ahí en el 3º. Decirme si esto no es obra del precioso destino...

Evidentemente, uno de los hilos conductores de la boda, no podía ser si no; la música - festivales.

El otro hilo, sin duda, sería la devoción de Isa por su San Juan. Tan importante en su pueblo, Huete. Pura pasión. Colores verde y rojos. Quien la conoce, sabe que esto sería así, si o si.

LAS INVITACIONES - EL DISEÑO

El inicio, las invitaciones, decidimos que fueran tipo "entrada de un festival"

Papel 220gr, formato vertical a una cara, con troquelado a un lado. Diseño con ellos de fondo, texto a modo de cartel, código de barras, precio entrada.... no faltaba nada.

Añadimos además, para dar un toque más formal, un sobre a juego que iba rematado por una etiqueta con los nombres de invitados de forma individual. El resultado, a continuación.

Isa y Ade escogieron nuestros servicio íntegro de WEDDING PLANNERS: ORGANIZACIÓN, COORDINACIÓN y DECORACIÓN. Al que sumaron DISEÑO y MESA DULCE.

La organización la recuerdo de forma tranquila. Pese a cambios de restaurante, el reto de la ceremonia y un par de gestiones más complicadas, pero con ellos, todo fue fácil.

Como debota de San Juan, el sueño de Isa desde niña, era casarse en Santa María de Atienza. Una antigua iglesia del s. XIII. Hoy en día sólo se conserva el ábside (reformado), con una majestuosa cripta. También se conservan parte de sus muros.

Las vistas, en el alto de Huete, su pueblo... son verdaderamente imponentes.

Si mal no nos dijeron, es la 2ª boda que se celebraba allí, así que como os comentaba antes, era todo un reto.

Pero conseguimos el sueño de Isa. Su boda en Atienza.

Fue una ceremonia de tarde, un 1 de Julio (coincidía además con el cumple de la novia).

Un día de auténtico calor veraniego y mis casi 20 semanas de embarazo.. Nunca lo olvidaré por muchos aspectos.

Para la entrada, dispusimos punto de sombrillas, cubretacones y paipais. Vestimos también la bajada de acceso y barandillas.

Una vez dentro, pusimos una "barra" con agua muy muy fría y refrescos. Creedme cuando os digo, que no quedó nada. Un acierto!

Para el camino que recorrería la novia, no podíamos dejar de vestirlo con alfombra roja de 55 metros que sólo ella estrenaría ¡y cómo lalució!

Sillas de madera para ese enclave, con plantitas por todos sitios, para dar toques de su color verde. El apoyo de plantas y flor, nunca está demás.

El altar, lo vistieron las mujeres de Huete encargadas de vestir a San Juan. Su padre encargó dos imágenes imprescindibles para ellos, que con mucho gusto colocamos, para sorpresa de ella. Sí pusimos dos pies de forja gigantes y maravillosos, que en la cromática elegida destacaban y lo llenaban todo.

Una ceremonia super emotiva, que amenizaron los chicos del Cuarteto 4 Estaciones con quien tanto nos gusta contar.

¡Y qué guapos estaban nuestros soñadores!

A la salida, la misma escalerita esta vez, conos con mezcla de pétalos de rosas y clavel verde. ¡Ideales!

Pasen y vean...

Otro de los retos fueron las distancias. Gestionar los autobuses de casi 300 personas de dos puntos tan lejanos, 1º al lugar de la ceremonia, después, al del convite, con casi una horita de trayecto. Pero nunca mejor dicho, fue todo sobre ruedas... para eso estamos.

Lo celebraron el Restaurante Nelia.

Una vez allí, el seating sería también muy musical y temático, ambientado en el hilo de los festivales y sus colores... que definirían el completo de la boda.

Contrataron el servicio de Beauty Corner de nuestra querida Aruca. Por supuesto, después de los trayectos, las invitados y la misma novia, agradecieron, y mucho, el retoque de maquillaje ;D

... Y a partir de aquí, la boda se convirtió en una auténtica fiesta. Porque cada boda refleja (o debe) la manera de ser de cada pareja. Y ellos son pura fiesta, pura diversión. Son locura y música.

Como la definía al inicio, Isa es pura nobleza, y nobleza plena la de Ade también. Reafirmando lo dicho, las almas idénticas, están destinadas...

Os queremos mucho soñadores.

GRACIAS por tanto. Parece que no haya pasado el tiempo, os aseguro que conservamos el recuerdo intacto como si fuera ayer, y no ha cambiado; sigue siendo maravilloso.